La retrognatia en bebés es cuando tienen la mandíbula inferior muy por detrás de la superior. En la mayoría de los casos suele corregirse antes de los 3 meses, pero hay que vigilar que no afecte a la lactancia.
La retrognatia en bebés es cuando la mandíbula inferior está más atrás de lo que sería normal.
Todos los recién nacidos tienen cierta retrognatia, lo cual les facilita la salida por el canal de parto y la lactancia materna, y generalmente se va corrigiendo según avanza el desarrollo del bebé.
Cuando la retrognatia es muy marcada, puede dar lugar a problemas con la lactancia, asociándose con la frenillo corto del bebé.
oGeneralmente se corrige durante los primeros 3 meses de
, aunque en ocasiones para entonces ya es tarde, haciendo imposible la lactancia materna si no se toman ciertas medidas.Las clases de retrognatia más comunes son:
La retrognatia funcional es muy útil durante la época fetal, ya que ayuda al feto a tener la boca cerrada, impidiendo que trague demasiado líquido amniótico, meconio en caso de que se expulsase dentro...
Esto se debe a un bloqueo del hueso temporal derecho, impidiendo que la mandíbula avance, y por norma general, al sufrir la presión de pasar por el canal de parto cesa este bloqueo. De ahí que la retrognatia suele corregirse sola durante los 3 primeros meses de vida.
Sin embargo, en algunos casos como cesáreas, parto con epidural, partos inducidos con oxitocina, uso de fórceps... el cráneo no sufre la presión natural, pudiendo permanecer la boca de pico de pato por muchos meses.
El principal síntoma de retrognatia es que la mandíbula inferior está más atrás de lo normal, retrayéndose con ella la lengua y elevándose la base de la boca.
Esto hace que algunos frenillos cortos se hagan más evidentes, dificultando aún más que el bebé pueda hacer vacío para succionar el pecho.
Funcionalmente, un bebé con retrognatia tiene boca de pato. Para mamar pinza el pezón, irritándolo mucho e impidiendo que saque suficiente cantidad de leche materna.
Cuando mama, por la comisura de los labios le entra mucho aire, relacionándose con problemas de gases en el bebé.
Si piensas que tu bebé puede tener retrognatia, puede interesarte hacerle un seguro privado de salud. Así podrán valorarle especialistas y considerar un diagnóstico.
Contrata un seguro de salud para tu bebé
La retrognatia del bebé, aunque tienda a corregirse a los 3 meses de vida, afecte gravemente a la lactancia materna, haciendo que en muchos casos se recurran a los biberones de leche de fórmula cuando no es necesario.
Es muy frecuente una retrognatia en recién nacidos leve, posibilitando un contacto estrecho con el pecho de la madre, haciendo que el agarre sea profundo y la lactancia se establezca sin problemas.
Sin embargo, cuando la retrognatia es más marcada, interfiere con la lactancia, provocando dolor a la madre como grietas en el pezón por el agarre incorrecto del bebé.
La situación se complica aún más cuando se juntan anquiloglosia y retrognatia: la mandíbula inferior está retraída y el frenillo lingual es corto, dificultando mucho una succión correcta.
Además, como el recién nacido no es capaz de sacar correctamente la leche, puede provocar ingurgitaciones e incluso mastitis de (3) .
La mandíbula hacia dentro no solo ocasiona problemas en la madre, el bebé también sufre consecuencias: traga aire, por lo que tendrá gases, y al comer menos de lo que necesita no ganará suficiente peso, estando más irritable.
Existen algunas posturas de lactancia para retrognatia que pueden emplearse para que el bebé pueda hacer un agarre profundo del :
Debemos vigilar, en todas las posturas que el agarre del pecho sea correcto: el bebé debe tener los labios evertidos hacia fuera, abriendo mucho la boca, de manera que no cubra solo el pezón, sino gran parte de la areola.
Los bebés con la mandíbula hacia atrás, al no llegar bien a hacer la succión tienen tendencia a tener un mal agarre, siendo típico en la retrognatia el bebé con labio inferior hacia adentro.
En estos casos debes separarle del pecho y corregir el agarre de lactancia, asegurándote de que tanto el labio superior como el inferior están hacia fuera a pesar de que tenga la mandíbula hacia
..Si mi bebé no abre bien la boca para amamantar hay que tomar cartas en el asunto, o la lactancia no podrá mantenerse mucho tiempo debido a la mandíbula retraída.
En la inmensa mayoría de los casos, antes de que el bebé cumpla 3 meses la mandíbula inferior se adelanta, quedando solucionada la retrognatia.
Si aún probando con las posturas de lactancia de agarre profundo el bebé sigue teniendo problemas para alimentarse, consúltalo con tu pediatra.
En los casos más graves de retrognatia, el bebé no consigue agarrar el pecho y tendrás que darle biberón, ya sea de tu propia leche extraída o de fórmula.
Si no se corrige cuando el bebé tenga 3 meses, no existe un tratamiento temprano para la retrognatia. Más que vigilar el crecimiento mandibular.
Durante los primeros 5 años de vida, especialmente en los 12 primeros meses, la mandíbula crece considerablemente y suele corregirse. Si no es así, se podría valorar una cirugía maxilofacial antes de que empeorase la situación.
Cuando la retrognatia no se resuelve sola es necesario consultar a un fisioterapeuta pediátrico cuanto antes.
La terapia orofacial es un tipo de tratamiento craneal del bebé, en el cual se valoran, previenen o corrigen alteraciones en la musculatura orofacial del peque.
El fisioterapeuta pediátrico evalúa en primer lugar los reflejos musculares del bebé, su lengua por si tuviese frenillo (se hace más evidente con la retrognatia) y su cuello.
Las sesiones son indoloras para el bebé, suelen durar de 30 a 45 minutos y es frecuente que el fisio os enseñe algunos ejercicios para hacer en casa.
Se trata de un trabajo multidisciplinar, ya que si existe frenillo se derivaría a médicos para su corrección, siendo en ocasiones también necesario desarrollar un tratamiento coordinado con logopedas u otros especialistas.
Gracias al tratamiento para bebés con retrognatia, pueden conseguirse una serie de beneficios:
Los ejercicios orofaciales tienen como objetivo estimular la cavidad oral del bebé, mejorando su movilidad, deglución y funcionamiento de la articulación mandibular (ATM).
Deben realizarse siempre por recomendación de un fisioterapeuta especializado, ya que en función de la patología del bebé debe incidirse de una manera u otra sobre la cavidad oral.
En los ejercicios orofaciales básicos podemos distinguir estimulación perioral e intraoral.
La estimulación perioral es aquella que se hace en los alrededores de la boca:
La estimulación intraoral es la que busca mejorar las estructuras interiores de la boca:
Todos ellos deben hacerse delante del fisioterapia para que confirme que se están efectuando bien, y si en algún momento el bebé se siente incómodo o llora hay que parar y seguir cuando esté contento y tranquilo.
Si no se trata a tiempo, la mandíbula retraída del bebé ocasionará una serie de problemas tanto a corto como a largo
.Estas afecciones empeorarán con el tiempo, generando el retrognatismo mandibular problemas en el adulto que sólo podrán mejorarse recurriendo a intervenciones quirúrgicas en la mandíbula.
Los principales problemas causados por la retrognatia, tanto en el bebé como la retrognatia en niños y adultos
:Problemas causados por retrognatia en bebés | |
---|---|
Problemas en bebés | Alteraciones en adultos |
Tensión en la articulación temporomandibular | Dificultad para pronunciar correctamente |
Disfagias: dificultad para tragar | Mala destreza manual fina |
Problemas para ganar peso correctamente | Alteraciones en la mordida (maloclusiones) |
Apnea del sueño | Apiñamiento dental |
Gases | Desgaste desigual de los dientes |
Bruxismo | Problema a nivel estético |
La mandíbula retraída en el bebé la diagnostica el pediatra basándose en su posición respecto al resto de la cara y su tamaño.
Al contrario que en la retrognatia, en la prognatia la mandíbula inferior está adelantada respecto a lo normal, dando una sensación de mandíbula inferior salida.
Existen muchos motivos por los que el bebé puede no agarrar bien el pecho: mala posición de la madre, inmadurez del bebé, falta del reflejo de succión, frenillo sublingual corto... la retrognatia solo afecta a la lactancia cuando es bastante acusada.
La micrognatia es cuando la mandíbula inferior presenta un desarrollo inferior al adecuado a la edad: es más pequeña de lo normal.
Por su parte, en la retrognatia el problema es la proyección de la mandíbula inferior respecto a la superior.
Si a mi bebé le cuesta agarrar el pezón puede deberse a muchos motivos: bebé prematuro, poco contacto piel con piel nada más nacer, inmadurez...
Para mejorar la succión la postura de caballito de lactancia del recién nacido es ideal, favoreciendo un agarre profundo del pezón.
Cuando estés haciendo la posición de caballito para amamantar asegúrate de que pones el pezón a la altura de la nariz del bebé, para que este incline la cabeza hacia atrás para alcanzar el pezón, consiguiendo adelantar ligeramente la mandíbula hacia dentro.
No tiene por qué. La succión masticatoria, como su nombre indica, es un tipo de succión en el que el bebé mueve la mandíbula a modo de masticación, generando dolor a la madre, pero esto no tiene relación con que tenga la mandíbula inferior más corta.